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Muertes sobre ruedas debe cesar, La Prensa, 8 de abril de 2010

Ley no impide que pasajeros vayan en lugares que corresponden a cargas o animales

El incremento de los accidentes de tránsito en el país, que sólo en una semana cobró la vida de 28 personas, ha llevado a algunos funcionarios a sugerir una revisión de la Ley 431 (Ley para el Régimen de Circulación Vehicular e Infracciones de Tránsito).

El diputado liberal Maximino Rodríguez responsabiliza a la Policía y exige que aplique la ley y prevenga este tipo de hechos.

Por su parte el magistrado de la Corte Suprema de Justicia (CSJ), Sergio Cuarezma Terán, señala que “éste es un tema que las instituciones estatales y la sociedad nicaragüense debemos encarar y prohibir, siempre que la intención sea proteger la vida y la integridad de las personas, que nadie debe ir en las tinas de camionetas, en camiones o en las rastras, porque supone la creación de un peligro grave; ir en estos espacios no supone desde ningún punto de vista ningún tipo de seguridad, sino una muerte o lesión segura”.

VACÍOS EN LA LEY

Uno de los señalamientos que se han hecho es de que la ley presenta un vacío, pues los conductores que recargan de pasajeros las tinas de las camionetas no son multados.

Para Cuarezma Terán la legislación no ha prohibido que las personas vayan en las áreas de carga. Por ejemplo, la Ley de 1937 reformada en 1948, establecía que en vehículos de transporte de carga podrán viajar pasajeros, siempre que esto no constituya peligro (artículo 43); por su parte la Ley 431/2003 no prohíbe este hecho, a pesar que en el proyecto de la misma incorporaba el tema, pero la presión de los conductores comerciales impidió que esto se prohibiera.

“Esto llevó a la Policía Nacional a que en la Disposición 019/04 creara una medida especial para vehículos de tina, advirtiendo que podrán circular con pasajeros sentados en el piso o fondo de la tina, de acuerdo a la capacidad del mismo, tomando todas las medidas y precauciones necesarias (artículo 70), sin embargo ninguna medida o precaución garantizará la seguridad de las personas en las tinas de los vehículos, porque ésta se hizo para llevar animales y carga”, señala el magistrado y también profesor de Derecho Penal.

Respecto a que si se necesita una revisión de la Ley 431, la Directora de la Policía, primera comisionada Aminta Granera, dijo: “Podemos renovar y hacer los cambios últimos que existan, pero si no hay una conciencia, una educación de parte fundamentalmente de los conductores vamos a seguir teniendo los problemas”.

Granera anunció que esa institución revisa las acciones que emprenderá a fin de incidir en los accidentes de tránsito.

Aunque la jefa policial consideró que en el problema de los accidentes de tránsito es determinante el factor humano, el tema debe ser abordado desde la familia, la educación primaria, secundaria y universidades. Asimismo incluyó a los medios de comunicación.

Granera refirió que la Policía también revisa a lo interno lo relativo a la regulación operativa y las capacitaciones que reciben los agentes de tránsito.

A su vez, Granera anunció que “estamos viendo cómo ser más exigentes para otorgar las licencias de conducir, revisando los exámenes teóricos, los exámenes prácticos, los seminarios de educación vial que van a tener los conductores”.

En el caso de los conductores del transporte urbano colectivo, la jefatura policial ha establecido que éstos deberán recibir cada año los seminarios de capacitación.

FACTOR CRIMINÓGENO

De acuerdo con Cuarezma Terán, “no prohibir que la gente vaya en la tina de un vehículo tiene un efecto criminógeno, es decir un factor para la comisión de conductas delictivas imprudentes”.

“Lamentablemente esta permisibilidad ha creado o fortalecido una cultura de ver los accidentes de tránsito como algo fortuito (accidental), pero en realidad las muertes y lesiones producidas por estos hechos por lo general son conductas imprudentes, no accidentales. Las muertes de las 12 personas en Rivas que iban en la tina de la camioneta no fueron un accidente producto de factor humano del conductor, sino producto de no prohibir que las personas vayan en la tina de los vehículos”, considera el magistrado Cuarezma Terán.

El funcionario judicial dice que los accidentes de tránsito incrementa cada año los riesgos y peligros para la conducción y los peatones.

“Si a esto le sumamos la gente en las tinas de las camionetas, pues habrá más muertos y lesionados. Entre 2007 y 2009 se han conocido en término general por la justicia penal 788 homicidios imprudentes y 520 lesiones imprudentes. Y, del 1 de enero del 2008 a la fecha, en los Centros Penales del país sólo guardan prisión cuatro personas: tres por homicidio imprudente y una por lesión”, resaltó el magistrado.

Una nutrida marcha de familiares y amistades de Aldo Mora Narváez, acusado por la muerte de 12 jóvenes en un accidente de tránsito, protestaron por las principales calles de Rivas, pidiendo libertad del joven detenido. LA PRENSA/ R. VILLARREAL
Una nutrida marcha de familiares y amistades de Aldo Mora Narváez, acusado por la muerte de 12 jóvenes en un accidente de tránsito, protestaron por las principales calles de Rivas, pidiendo libertad del joven detenido. LA PRENSA/ R. VILLARREAL

CAMPAÑA MASIVA

A criterio de Granera, la situación generada por los accidentes automovilísticos en el país requiere de una gran campaña en la que se involucren los diferentes sectores de la sociedad como los medios de comunicación, el sector religioso, los colegios y la familia, que permita la toma de conciencia “de la responsabilidad que supone ir al frente de un timón que es como ir con un fusil bala en boca”.

Durante las vacaciones de Semana Santa los accidentes de tránsito con saldos trágicos tuvieron un repunte en el país.

Entre las principales causas de accidentes que provocaron saldos sangrientos, según la Policía Nacional, fue la invasión de carril, desatender señales, efectuar giros indebidos, caída de pasajero, imprudencia peatonal, falta de tutela, exceso de velocidad y falta de pericia. Según la jefa de Relaciones Públicas de la Policía, comisionada mayor Vilma Reyes, las causas se han mantenido en los últimos tiempos.

Datos de la Policía de Tránsito indican que en 2008 ocurrieron 22,334 accidentes con un saldo de 514 fallecidos y 5,462 lesionados. El año pasado cerró con 22,849 percances con un saldo mortal de 601 personas y 5,524 lesionados. Entre enero y febrero ya habían ocurrido 3,610 accidentes que dejaron 110 muertes y otros 892 lesionados.

LA EPIDEMIA ACTUAL

“Siempre he dicho, el problema de accidentes de tránsito es conocido como la epidemia de la civilización actual. Tres factores inciden: el conductor, el vehículo y la vía (…) más allá de la ley, que si toda ley requiere reformarse, toda ley requiere de ajustarse, siempre es posible hacer mejoras, siempre es posible ser más estrictos en la aplicación, pero no se trata de eso, lo fundamental es qué vamos a hacer como sociedad, como Estado para incidir en estos tres factores”, preguntó la jefa policial.

Tras señalar que durante el Plan Verano tenían policías casi cada cinco kilómetros en las carreteras, “pero la presencia policial es preventiva”.

Mencionó que en estas fechas religiosas recién pasadas, por las vías del país se movilizó una cantidad de vehículos superior al número de policías con que cuenta la institución.

“Muy superior, por lo tanto, ni que pongás a un policía en cada vehículo vas a evitar accidentes. La presencia de la Policía en la vía sí es preventiva, es persuasiva, pero pueden pasar despacio por el retén y acelerar una vez que lo hayan pasado”, apuntó la jefa policial.

Esta imagen es elocuente. Los agentes de la Policía de Tránsito deberían impedir escenarios como éste, a pesar que la ley no castiga a los conductores que llevan pasajeros en la tina. LA PRENSA/ G. MIRANDA
Esta imagen es elocuente. Los agentes de la Policía de Tránsito deberían impedir escenarios como éste, a pesar que la ley no castiga a los conductores que llevan pasajeros en la tina. LA PRENSA/ G. MIRANDA

ACUSACIÓN PODRÍA ARCHIVARSE

Mientras la Fiscal Departamental de Rivas, Isolda Ibarra, aseguró ayer que existe la posibilidad de que quede cerrado el proceso legal que se sigue en Rivas para Aldo Mora Narváez, conductor de la camioneta involucrada en el accidente de tránsito que cobró la vida de 12 personas que viajaban en la tina de la misma, de llegar éste a un arreglo moral con las familias de las víctimas.

Señaló que 10 de las familias han referido que están de acuerdo en buscar un acuerdo moral con el procesado y extraoficialmente saben que las otras dos familias estarían también de acuerdo en lo mismo, y la Fiscalía está anuente a escucharlos.

Ibarra recordó que la ley establece que si las partes están de acuerdo puede llegarse a una mediación.

Diputado responsabiliza a la Policía

El presidente de la Comisión de Paz, Defensa, Gobernación y Derechos Humanos, Maximino Rodríguez, señaló ayer a la Policía Nacional de ser “benevolente” con los conductores que infringen la Ley de Tránsito, a propósito del accidente ocurrido en Semana Santa, que dejó a 12 personas fallecidas.

Rodríguez aseguró que la Ley de Tránsito plantea multas cuando los conductores conducen en estado de ebriedad o cuando los vehículos llevan sobrecarga de pasajeros. Ambas faltas coincidieron fatalmente en el accidente que segó la vida a 12 jóvenes de Rivas.

”Lo que pasa es que la Policía fue muy benevolente, porque la autoridad facultada para esa norma jurídica es la Policía (…) en este caso, lo que la Policía tiene que hacer es prevenir ese tipo de situaciones. La ley es dura, pero es la ley”, dijo.

Rodríguez sugirió a las autoridades aplicar el numeral dos del artículo 59 del Código Procesal Penal, el cual permite prescindir de la acción penal en algunos casos. Para Rodríguez, el conductor de la camioneta quedó muy afectado por la tragedia, por lo cual no debería ser sometido a un proceso penal. “La primera responsable es la Policía Nacional, que tiene que hacer cumplir la ley”, señaló Rodríguez.

El magistrado de la Corte Suprema de Justicia (CSJ), Sergio Cuarezma Terán, dijo que “éste es el momento de hacer un alto y regular esta situación y prohibir de una vez por todas que personas viajen en áreas de cargas de los vehículos, cuando en realidad debe ser utilizada únicamente para llevar cosas o animales. No hay una sola razón o justificación que permita que esto siga sucediendo, salvo que tengamos un total desprecio a la vida e integridad de las personas”.

Agregó que este problema contrasta con otra realidad. Por una parte, se suman los muertos y lesionados, y por otra, los vivos se reparten el beneficio económico a través de la mediación (situación que parece no se dará en el caso de los 12 muertos en Rivas). “O dicho en otras palabras, todo indica que el valor de la vida en el país se ha devaluado y por tanto, no importa recurrir a la justicia, basta que las personas determinen si el hecho es o no imprudente para que puedan llegar a un acuerdo y el hecho queda extinguido, a cambio de una indemnización que puede variar”, reflexiona el magistrado.

“En algunos casos por una niña muerta pagan 3,000 córdobas, en otros casos por tres muertos a la vez unos 20,000 dólares, y así según la víctima o los recursos del que mató por un acto imprudente. En el Código Procesal Penal (CPP) la mediación no tiene límites, pues una persona puede mediar tantas veces como mata imprudentemente, convirtiéndose la mediación en una sugerencia para matar”, analizó el funcionario judicial.

“Hay que parar tantas muertes gratuitas en accidentes de tránsito, dándole el uso debido a los vehículos, de lo contrario dejemos de sorprendernos cuando escuchemos de 12 jóvenes muertos en una carretera, porque de esas muertes todos somos responsables”, señaló.

“Hay que parar tantas muertes gratuitas”

El magistrado de la Corte Suprema de Justicia (CSJ), Sergio Cuarezma Terán, dijo que “éste es el momento de hacer un alto y regular esta situación y prohibir de una vez por todas que personas viajen en áreas de cargas de los vehículos, cuando en realidad debe ser utilizada únicamente para llevar cosas o animales. No hay una sola razón o justificación que permita que esto siga sucediendo, salvo que tengamos un total desprecio a la vida e integridad de las personas”.

Agregó que este problema contrasta con otra realidad. Por una parte, se suman los muertos y lesionados, y por otra, los vivos se reparten el beneficio económico a través de la mediación (situación que parece no se dará en el caso de los 12 muertos en Rivas).

“O dicho en otras palabras, todo indica que el valor de la vida en el país se ha devaluado y por tanto, no importa recurrir a la justicia, basta que las personas determinen si el hecho es o no imprudente para que puedan llegar a un acuerdo y el hecho queda extinguido, a cambio de una indemnización que puede variar”, reflexiona el magistrado.

“En algunos casos por una niña muerta pagan 3,000 córdobas, en otros casos por tres muertos a la vez unos 20,000 dólares, y así según la víctima o los recursos del que mató por un acto imprudente. En el Código Procesal Penal (CPP) la mediación no tiene límites, pues una persona puede mediar tantas veces como mata imprudentemente, convirtiéndose la mediación en una sugerencia para matar”, analizó el funcionario judicial.

“Hay que parar tantas muertes gratuitas en accidentes de tránsito, dándole el uso debido a los vehículos, de lo contrario dejemos de sorprendernos cuando escuchemos de 12 jóvenes muertos en una carretera, porque de esas muertes todos somos responsables”, señaló.

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